Descansando en la colina

Después de cumplir todas sus tareas del día y adelantado algunos preparativos para extender una zona tropical en su casa, había salido ha dar un paseo. Ya entrada la noche, aprovechó para comenzar a recorrer la ciudad a la velocidad que disfrutaba. Nadie podía verla, corriendo y moviéndose así, podía entrar y curiosear todo a gusto. Pero la ciudad le parecía un tanto aburrida, así que regresó a la zona de residencia y se detuvo de golpe al llevar a la colina. Al detenerse realmente parecía que se hubiese aparecido de la nada.

Clio llevaba su falda gitana negra y un top del mismo color, sus pies estaban descalzos, pero se veían limpios, como si no hubiese tocado el suelo nunca.

- Que bonito -murmuró, al escuchar a los grillos y el aroma de las flores nocturnas, la chica se dejo caer en el suelo para disfrutar.

Era tarde y Agatha paseaba con su perro Eye por las calles de la ciudad. Era la mejor hora para salir, pues así no había tanta gente y tenía muchas menos posibilidades de chocar con alguien. Eye corrió hasta las colinas jugando con una mariposa nocturna y Agatha le permitió guiarla con plena confianza.

De pronto el animal se detuvo y comenzó a gruñirle a una chica que estaba en el suelo.

- ¿Que ocurre Eye? - preguntó la chica a su mascota, como si esta pudiese responderle.

El sonido de aquel perro la sobresalta, estaba conmovida por el entorno y su música divina. El ladrido le había llegado muy fuerte y por un momento no reacciona, al siguiente, nota al animal y lo mira a los ojos, le sonríe. El perro se calma, su conexión con la naturaleza, su protección a esta, la hacía protegida y protectora de las criaturas.

- Buenas noches -saluda, al notar a la joven con el perro- ha sido mi culpa, estaba entre las hiervas y he asustado a tu perro -dice apenada, se acerca, acaricia al animal con cariño, emocionada de ver otro canino por la zona- soy Clio -se presenta a los dos, a la chica y al perro.

- Mi nombre es Agatha - responde la chica un poco desorientada, ya que no sabía donde exactamente se encontraba la otra muchacha - y este es Eye, perdón si te ha molestado, pero como no te he visto supongo que trataba de advertirme que estabas ahí - dijo y luego sonrió levemente.

Al notar que no la veía se acerca a ella y le toma la mano, pra que sepa donde está.

- Es un placer conocerlos -se inclina y con la otra mano, continua acariciando atrás de a oreja del perro- Espero no sonar demaciado curiosa, pero ¿Qué hacen ustedes dos aquí? Para ambos, puede ser peligroso este lugar

- Estabamos paseando... prefiero pasear por la noche ya que en el dìa hay mucha gente en todas partes y Eye es muy inquieto. Llegamos hasta aquì ya que he dejado que Eye me guie, por lo que pude notar Eye jugaba con un grillo y el pobresito debe haber huido hasta aquì para ocultarse - dije manteniendo mi sonrisa. - Si es tan peligroso, ¿Por que estas tu aquì? - pregunte curiosa.

- No debes molestar a las criaturas más pequeñas que tu -le dijo a Eye- puedes perder a tu ama, asustar a la criatura o por cuestión del destino, luego ser tu la criatura pequeña a la que molestan ¿Verdad que no quieres eso? -mientras hablaba, se comunicaba directamente con el perro para que le entendiese- ¿Yo? -observa a todos lados- Yo me se cuidar sola ¡Soy muy rápida! Además, aquí, la naturaleza es mi ventaja, como para ti, Eye.

- Tengo plena confianza en Eye, aunque tal vez si debería cuidarme aquí, es una ciudad grande y muy distinta al lugar desde el que vengo - dije, más bien reflexionando en voz alta.

- Si, Eye daría la vida por ti -dijo muy segura, de solo ver la mirada del animal- ¿Y de dónde vienen? -preguntó curiosa

- Vivía en un pequeño pueblo en japón - dije - Mi padre es britanico y mi madre era japonesa - aclaré luego, ya que podría pareserle extraño a la chica que una muchacha japonesa tuviese un apellido inglés.

- Oh... mi hermano disfruta mucho Asia, en especial Japón -le dice entusiasmada, se agacha para dar mejores mimos al pequeño perro, abrazándolo- tu país materno, por lo que oído, es muy hermoso. Yo nací en Alemanaia, pero viví mucho tiempo en África, es un lugar encantador, a Eye le encantaría

- De seguro adoraría tener tanto espacio para jugar, es muy inquieto - sonreí - Si, japón es un país muy bello, aunque me gusta la tranquilidad que hay aquí, en comparación, japón es agitadísimo.

- Si, Japón tiene sobrepoblación. Reamente debe ser difícil tener una auto ahí. Aunque no me gustan esas cosas. Prefiero usar mis piernas ¿Y a qué debe su visita a esta cuidad? Yo también soy nueva -admite, con una suave risilla.

- Es algo complicado de explicar - dijo la chica y lanzó una risita incomoda - digamos que estoy buscando un mejor lugar donde vivir, ya que en japón no tengo muchas oportunidades... verás, estoy ciega - dijo la muchacha - y mi madre habia buscado por muchos años un colegio donde me aceptaran pero en todos me mandaban a la clase con quienes tienen problemas de aprendizaje, y yo no los tengo, solo que no puedo ver, por lo tanto no puedo leer ni estudiar de un modo convencional... eso y otros problemas hicieron que decidiera venir a Inglaterra... pensé que en europa, donde la sociedad es mucho más abierta, podría encontrar un poco más de oportunidades... en japón son todos muy cerrados y apegado s asus ideas - explicó la chica sin dejar de sonreir.

Realmente, ella ya sabía la historia, desde el inicio, se lo dijo Eye, a lo cual, le parecía interesante, porque la chica era una luchadora.

- Aquí puedes encontrar más oportunidades, es verdad. Yo aquí aprendí algunas cosas -le dijo con una suave sonrisa- y sigo aprendiendo. Mi hermana es más entradora en esta ciudad. Me había dado cuenta desde el inicio, suelo tener habilidad para ello, pero tus otros sentidos deben ser más desarrollados.

- Pues, supongo que puedo oir, oler y percibir las cosas mucho mejor que la mayoría - dije sonriendo

- Lo se -asegura divertida y se percata de lo raro que suena- Bueno, lo imaginé -intenta arreglar- ¿NO hay problema si le doy algo de comer a Eye? -dice, mientras saca unos frutos secos de su bolsillo.

- Claro que no - dije sonriendo - aunque es un poco quisquilloso